ENCABEZA MARTÍ BATRES ENTREGA DE LOS TRABAJOS DE RESTAURACION DEL SANTUARIO DE LA ASUNCION DE MARIA DE MILPA ALTA

Ciudad de México, a 14 de agosto de 2024.

ENCABEZA MARTÍ BATRES ENTREGA DE LOS TRABAJOS DE RESTAURACION DEL SANTUARIO DE LA ASUNCION DE MARIA DE MILPA ALTA

• Estuvieron presentes el alcalde Víctor Manuel Vanegas Tapia, funcionaros federales y locales.

En compañía del alcalde de Milpa Alta, Víctor Manuel Vanegas Tapia, el Jefe de Gobierno, Martí Batres Guadarrama, encabezó la ceremonia de entrega de los trabajos de restauración del Santuario Diocesano de la Asunción de María de esta demarcación, dañado por el sismo de 2017.

Ante funcionarios del gobierno federal,  local y de esta alcaldía, el Jefe de Gobierno dijo que era un día muy feliz para los habitantes de Milpa Alta, quienes, resaltó, han defendido su espacio como nadie, “los pueblos son muy unidos, muy cohesionados”.

Comentó que cuando se dan los datos de la inseguridad se dice que aumenta en la medida en que se incrementa la pobreza o  los grados de marginación, pero esto no ocurre en el sureste de la Ciudad de México, porque Milpa Alta y Cuajimalpa son las dos alcaldías con el menos número de delitos de alto impacto por cada 100 mil habitantes.

El secreto, señaló, es la comunidad que tiene su origen indígena, “ese es el secreto, esa cohesión de la comunidad es lo que le da seguridad y tranquilidad a mucha gente”; Milpa Alta sigue defendiendo su historia y tradición de sus 12 pueblos.

Milpa Alta, agregó,  ha defendido la religiosidad, “el fervor creyente, el fervor religioso, y la festividades en las parroquias, lugares importantes para el pueblo”, son puntos de referencia de identidad.

Destacó que en las parroquias, iglesias, templos, se ejercen los derechos religiosos de la mayoría del pueblo mexicano, pero, también, son parte del patrimonio cultural, “a nosotros como gobierno eso nos interesa, no podríamos decir es cosa de la parroquia, que los feligreses lo arreglen”.

Por el contrario, tras el sismo, el gobierno federal instruyó para que se pudieran arreglar más de tres mil templos afectados, tarea titánica que le tocó a la Secretaria de Cultura, que encabeza Alejandra Frausto, quien  estuvo presente en este acto  de entrega de los trabajos de restauración de este Santuario milpaltense.

En la ciudad, agregó,  “nos tocó una parte de la reconstrucción con la Comisión de Reconstrucción y la Secretaría de Obras, que estuvieron reparando y arreglando templos”, porque son parte de nuestra cultura e historia.

“Sabemos lo importante que son para el pueblo de México, para su religiosidad”, enfatizó Martí Batres, al congratularse por la conclusión de los trabajos que se realizaron en el Santuario de Milpa Alta, pues “son alma de pueblos y comunidades”.

Antes, en el mensaje de bienvenida, el alcalde Víctor Manuel Vanegas Tapia le dijo: “en Milpa Alta hay un gran aprecio por usted, está es su casa”.

Destacó que el  sismo de 2017 dejó una cicatriz profunda en los corazones de los habitantes de esta demarcación del sur de la Ciudad de México, porque además de la pérdida de vidas humanas se dañaron monumentos históricos y culturales.

Aquí, subrayó, prácticamente todos los inmuebles de este tipo fueron afectados; este Santuario “nos dolió verlo en las condiciones en que quedo, la gente le lloró, porque somos un pueblo con festividades, celebraciones, usos costumbres y una profunda identidad y matiz religioso”.

En aquel momento el cuadro era desolador, pero afortunadamente la sensibilidad de los gobiernos federal y local permitieron que poco a poco se recobrara este patrimonio.

“El pueblo de Milpa Alta está profundamente agradecido por los trabajos que se emprendieron por parte de las  autoridades y del Instituto de Antropología e Historia”, recobrando los templos de esta alcaldía su valor histórico.

Agradeció al padre Sergio Jorge García Llanos por estar al pendiente del largo proceso de restauración  y recordó que el templo tiene una antigüedad de 416 años y de forma reciente fue declarado Santuario,  de ahí el gran significado que tiene para las festividades de Milpa Alta, feligreses y de zonas circunvecinas. 

En su oportunidad, el párroco dijo sentirse alegre por la culminación de los trabajos que duraron siete años, “sabemos que lloramos, reímos, nos ilusionamos, trabajamos juntos para que se abrirán las puertas de la casa de la virgen de la Asunción”, que ha sido la madre de todos los pueblos originarios de Milpa Alta.