NOS QUIEREN CANSAR, NO NOS VAMOS A RENDIR

Ciudad de México, a 9 de agosto de 2024.

NOS QUIEREN CANSAR, NO NOS VAMOS A RENDIR

Por TOMÁS ROJAS MADRID/

En tanto que la Comisión de derechos Humanos de la Ciudad de México recomendó a las autoridades capitalinas, hace unas horas, no dejar en el olvido el caso de las hermanitas Sofía y Esmeralda, muertas al caer en una coladera hace dos años, la mamá de ellas, Elvira Canchola advierte: “No me voy a rendir”.

Lo anterior, durante un acto llevado a cabo en las instalaciones de la CDHCDMX, en donde la titular de ese instituto reconoció que la tragedia ocurrida en las proximidades de un estadio cercano a la confluencia del Viaducto Río Piedad y Añil, perímetro de Iztacalco, se pudo evitar.

La Comisión pide al gobierno capitalino ofrecer disculpas a la familia de las niñas fallecidas, pero en especial a la señora Elvira Canchola, madre de las víctimas, porque es ella la que más ha sufrido por lo ocurrido con ellas.

Se exige al gobierno de la ciudad una disculpa pública durante un acto simbólico que debe llevarse a cabo en el lugar donde ocurrió la tragedia.

Lo cierto es que han pasado dos años y la Fiscalía de Justicia de la Ciudad de México no ha logrado llevar ante los tribunales a algún responsable de la muerte de Sofía y Esmeralda.

Todas las instancias, llámense el Organismo de Aguas, el Gobierno de la Ciudad de México, o la alcaldía Iztacalco, se hacen a un lado y ninguno reconoce su responsabilidad.

La ahora presidenta electa también dejó pasar el tiempo y le dio largas al caso sin comprometerse a llegar al fondo para hacer justicia para la familia de Sofía y Esmeralda, y si en su momento nadie presionó, ahora menos, dicen los que conocen a fondo de los hechos.

En lo que todos coinciden es en que éste grave percance se pudo evitar, pero en el gobierno todo se deja para mañana, y ese mañana llegó con la tragedia para las hermanas Sánchez Canchola.